A través del proyecto de microcréditos “Súbete al Rickshaw”, realizado en 2007 en Bangladesh, se contribuyó a reducir la pobreza en las zonas urbanas y rurales más castigadas, ofreciendo préstamos para la compra de rickshaws para personas en riesgo de exclusión socio-laboral.

El rickshaw es uno de los medios de transporte más utilizados por la población que vive en Dhaka y en otras ciudades de Bangladesh. Es una especie de carro que hace las veces de taxi y que normalmente está conducido por una persona joven que pedalea y transporta a dos o tres personas durante cada trayecto.

Gracias a esta iniciativa, de una única edición, 242 familias lograron su inserción laboral a través de la financiación de rickshaw en colaboración con el socio local, la cooperativa Manabik Shahajya Sangstha (MSS).

En concreto, en 2008 había en Dhaka 247 rickshaws en funcionamiento gracias al proyecto de Fundación por la Justicia; y en el año 2009, la cantidad ascendía a 260 rickshaws.