Ayer, en el Espacio La Misti, tuvo lugar el esperado estreno del documental «Escuela Vecinal/Paraguay», un testimonio de la lucha del activismo vecinal en Paraguay frente a la corrupción institucionalizada. Este espacio, conocido por ser un lugar autogestionado y una conexión directa con las asociaciones del barrio, fomenta una cultura centrada en el contexto cercano y la participación ciudadana. En un ambiente íntimo y participativo, La Misti se consolidó una vez más como un referente para iniciativas que, como esta, promueven la justicia social y el empoderamiento comunitario.

El documental, dirigido por Mónica Ismael y producido por Fundación por la Justicia con la colaboración de FEDEM Paraguay, fue proyectado en primicia, generando un debate vibrante entre los asistentes y los protagonistas de la pieza audiovisual, los activistas paraguayos Hugo Vázquez Perini y Miguel Sanabria Irepa.

Tras la proyección, Vázquez y Sanabria compartieron sus impresiones y respondieron a las preguntas del público. Miguel Sanabria subrayó la importancia de su visita a España al decir: «La intención que nos trae a España es buscar un mejor vivir para nuestros compueblanos y construir una democracia verdadera.» Sus palabras reflejan el deseo de los activistas de consolidar una sociedad más justa y equitativa, alejada de las influencias del narcotráfico y la corrupción que han marcado su país en las últimas décadas.

El Espacio La Misti, además de servir como punto de encuentro para el arte y la cultura, se ha convertido en un faro para las asociaciones vecinales del barrio. Es un lugar donde las luchas locales y globales convergen, y donde el cine, la política y el activismo se unen para generar conciencia sobre las problemáticas que afectan tanto a Paraguay como a otras comunidades en el mundo.

Durante la charla, Hugo Vázquez expresó su preocupación por la situación económica y política de su país: «La economía de Paraguay está basada en la agroganadería. El miedo que tenemos es que el sistema sea narcopolítico.», dijo, alertando sobre los peligros de una creciente influencia del narcotráfico en las estructuras de poder del país.

El documental también resalta la Escuela Vecinal, un espacio que los activistas consideran clave para el empoderamiento de las comunidades locales. Miguel Sanabria describió este proyecto con orgullo: «La Escuela Vecinal es un sueño que constituimos como FEDEM.» Para los activistas, la escuela representa no solo un lugar de formación, sino un símbolo de resistencia y esperanza, donde los ciudadanos paraguayos pueden organizarse, aprender y luchar por sus derechos en un entorno hostil.

La tarde en La Misti no fue solo una oportunidad para disfrutar de cine comprometido, sino también un espacio de reflexión crítica. Los asistentes participaron activamente en la conversación, cuestionando y debatiendo sobre la situación actual de Paraguay y los desafíos a los que se enfrentan las comunidades vecinales. La proyección del documental y la mesa redonda con los activistas fueron un recordatorio del poder que tiene la organización ciudadana en la búsqueda de un cambio social duradero.

Espacio La Misti continúa demostrando su relevancia como un espacio autogestionado donde el barrio, las asociaciones y la cultura se encuentran para abordar las problemáticas que afectan directamente a su entorno y a otras comunidades a nivel internacional.

Este evento ha dejado una huella en el público, no solo por la importancia del tema tratado, sino por la conexión palpable entre las luchas locales e internacionales que se generó en el debate.